Y la luna nos observa,
y las estrellas, y el mundo,
mas sólo tú y yo sabemos
lo que realmente son,
solo los dos sabemos,
lo que es amar las luces
que el cielo y la tierra poseen.
Cuando miras la luna,
es la misma que yo bendigo
por iluminar tu rostro,
es la misma con la que hablo
y hablo hasta el amanecer,
y me cuenta sobre ti,
de como te arrulló el viento
mientras las estrellas te abrazaban
hasta quedarte dormida.
Cuando mires la luna,
recuerda siempre, que yo,
sea donde sea que me encuentre,
la estaré mirando, contigo.
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